
Son muy pocos los niños que pasan la lactancia sin sacar nunca alguna que otra pequeña bocanada de leche, es decir, regurgitándola. Para referirse a este hecho, las madres no emplean la incómoda palabra “regurgitación”, pero tampoco dicen que el niño “vomita” sino que “devuelve”, optando por un sinónimo más suave que da ya una […]